sin desconfiar de la pesada
Y no pensar que los pibes de la esquina
toman cerveza, se drogan y asaltan a los viejos
Sería mejor tener en cuenta que la seguridad es un negocio
que compra las cabeceras de góndolas
y las conciencias
Aunque la esperanza esté cada vez más verde
Y la prensa más amarilla
Aunque las cárceles estén llenas de pobres
y los delincuentes se eternicen en el poder
Vale la pena hacer el esfuerzo de confiar en nosotros
y volver a distinguir un artista de un mercader
Y también vale
cuidarnos sólo de quienes debemos
Al menos parece razonable
…pero no estoy seguro
ni quiero esa seguridad
Pedro 14/11/2006
Pedro J. López
1 comentario:
Yo a eso le doy el nombre de estar tranquilo entre los humanos.
Afuera los pterodáctilos, los mamut, los grandes peligros; dentro de la caverna, olvidemos un poco el temor.
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